Tras estudio de la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer
La sustancia fue incluida en la lista de sustancias cancerígenas por la Organización Mundial de la Salud, tras la publicación de un estudio realizado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer que respaldó décadas de investigación que advertían los riesgos asociados a este material. Especialistas de la Universidad de Chile plantean que, si bien se ha desincentivado el uso de talco en bebés, este polvo sigue presente en una variedad de productos cosméticos y alimenticios.
A principios de julio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo público un estudio desarrollado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC) que evaluaba la carcinogenicidad de sustancias como el talco y acrilonitrilo. En sus resultados, la entidad dependiente de la OMS confirmó nuevamente la clasificación de carcinógeno del acrilonitrilo, pero cambió la clasificación del talco ubicándolo por primera vez en la categoría de “Potencialmente Cancerígeno”.
Como explica el Dr. Luis Quiñones, académico del Departamento de Oncología Básico-Clínica de la Universidad de Chile, esta clasificación se basa en estudios realizados tanto en animales como en personas, agrupando los agentes por su mayor o menor posibilidad de generar cáncer en humanos. “Se estableció que el talco tenía evidencia científica suficiente en animales, esencialmente en ratas y en conejillos, donde se presentó evidencia de procesos carcinógenos proliferativos”, señala el académico.
Dr. Luis Quiñones.
Con estos resultados, el talco se ubica en el grupo 2A de la clasificación IARC, mismo sitio en el que están sustancias como plaguicidas, esteroides anabólicos o carnes rojas. Pero, como aclara el Dr. Quiñones, estos resultados no son una absoluta certeza de la carcinogenicidad del talco como lo sería si estuviera presente en el grupo 1. En sí, representa una mayor preocupación al estar comprobado que produce cáncer en animales.
“Se ha demostrado que en algunos casos hay asociación con algunas patologías neoplásicas. Por ejemplo, el cáncer de ovario y en la zona pélvica. Como en animales la evidencia es suficiente y en humanos es contradictoria o dudosa, se le categoriza en el grupo 2 porque la categorización 1 es la categorización de certeza absoluta”, explica el también académico de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile.
Cabe destacar que el talco es un mineral de origen natural e inorgánico hecho a base de magnesio, silicio y oxígeno. Como señala Olosmira Correa, académica del Departamento de Ciencia y Tecnología Farmacéutica de la U. de Chile, su extracción es realizada principalmente desde canteras, lo que hace posible que venga con contaminación de otras sustancias minerales. “Está el asbesto, que en sí es una sustancia cancerígena. Además, hay otras sustancias, como el plomo y el arsénico, que también pueden venir como contaminantes”, señala la profesora de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas.
Existen distintos casos que han mostrado el riesgo del talco. Los más conocidos han sido asociados con la marca Johnson & Johnson, quienes en 2023 dejaron de producir talco para bebé a nivel global, tras recibir cerca de 38.000 demandas de mujeres que acusaban que el producto les causó cáncer de ovarios. Es más, se ha señalado como riesgosa no solo su aplicación, sino también su inhalación, encontrando una posible relación entre la exposición al talco por parte de mineros con una serie de problemas respiratorios. “Esta cuestión es antigua, es tan antigua que a partir de los 80′ más o menos ya estaba desaconsejado el uso de talco a nivel pediátrico” indica la profesora Correa.
¿Qué pasará con el talco?
Actualmente, es más común ver el uso de sustitutos del talco para bebés en el mercado. Como señala la profesora Olosmira Correa, la mayoría de marcas usan ahora como alternativa el almidón de maíz como ingrediente principal. “Tiene propiedades absorbentes, pero también un origen natural y vegetal. Además, la contaminación que puede tener el polvo de almidón es mucho menor, por algo lo podemos usar en alimentos como la maicena”, destaca la académica.
Olosmira Correa
Si bien se ha desincentivado el uso de talco en bebés, este polvo sigue presente en una variedad de productos. Por ejemplo, es posible encontrarlo en sombras labiales, bases de maquillaje, protectores solares e incluso en productos como medicamentos comprimidos y en cápsula. De hecho, es posible encontrar alimentos que contienen talco como los jugos en polvo, que lo usan para opacar su color. Por ello, el Dr. Luis Quiñones afirma que este anuncio de la OMS debería producir un cambio conductual sobre el uso que actualmente tiene el talco. “Los médicos deberían empezar a decir que se restrinja completamente el uso de talco en niños. Por otro lado, en adultos debiera haber un límite o un control al respecto”, advierte el académico del Departamento de Oncología Básico-Clínico de la U. de Chile.
Sin embargo, la profesora Correa señala que este cambio será paulatino e implica que la industria comience a usar otros ingredientes y procesos como alternativas. “Involucra un cambio de maquinaria, de fórmula, etcétera. Entonces no puede hacerse un cambio de un día a otro. Los cambios generalmente son paulatinos (…) Hay que tomarlo como corresponde, pero la agencia regulatoria es la que tiene que trabajar”, concluye la académica.
FUENTE: Universidad de Chile